El supuesto de hecho se inicia el día 3 de agosto de 2007, cuando el trabajador Don Juan, es despedido de su puesto de trabajo por el Director General de la Compañía “X”, cuando  le comunica verbalmente, que la empresa había decidido que no continuara prestando sus servicios. Ante ello, el trabajador le pidió una mínima explicación, a lo que el Director respondió, que resultaba muy caro para la empresa, y no estaban contentos con su rendimiento.

El trabajador remitió burofax en fecha 20 de agosto de 2007, requiriendo a la empresa para que le clarificaran la situación laboral, y recibió contestación el 23 de agosto de 2007, también por burofax, en el que la empresa le comunica que al no existir relación laboral, no puede haber existido ninguna rescisión de contrato laboral.

El cliente es Don Pedro. Su objetivo, se declare la improcedencia del despido, y se condene a la empresa a su  readmisión o al abono de una indemnización de 45 días de salario por año trabajado.

La estrategia del Abogado, se basa en demostrar que a consecuencia del despido verbal sin causa legal, estamos ante un supuesto claro de despido improcedente, ya que no existe justificación legal que ampare la medida de rescindir los servicios laborales de Don Pedro.